Joy To The World The Lord Is Come

No es fácil escribir una felicitación Navideña en un blog donde la gente está acostumbrada a expresiones como "pajeble", "electrocución anal", y cientos de sinónimos del termino pene.
Pero aun así voy a arriesgarme a mandaros un mensaje navideño a todos vosotros queridos flipers.
Simplemente quiero desearos a todos que paséis una feliz noche, que olvidéis por un instante todos los rencores, las envidias, los malos sentimientos y los cabreos y que disfrutéis con vuestras familias, vuestros amigos o quienquiera que tengais a vuestro lado.
Que otro año más tratéis de recuperar la inocencia con que los niños ven el mundo para que todos podámos ser un poco más felices y podamos hacer más felices a los demás.
No nos quedemos únicamente con la tan criticada imagen consumista de la Navidad, creemos nuestra propia Navidad, tratemos de olvidaros un poco de nosotros mismos para intentar hacer felices a los demás, a esos abuelos que están malitos, a ese amigo con el que ya no se habla por un motivo del que ya no te acuerdas, a esa persona especial que vive lejos y a la que nos gustaría ver.
Y no voy a enrollarme mucho más, sólo desear al Dr. Muerte, a Segundo, a Vattic, a Vicious, a Keme-Kemo-Lacolita, a Spider-Snake, a los Achopijeros y a todos los que hacéis posible este blog, incluidos vosotros pequeños flipers una muy Feliz Navidad.

Y venga, que es Navidad. Aquí tenéis una Mamas Noel al estilo fliper:

Ahmed os felicita la navidad.

He aquí otro vídeo de Ahmed el terrorista muerto. Esta vez felicitándonos la Navidad.

Grandes Obras Clásicas: Noche en la Montaña Pelada

Bueno, hoy volvemos con una de nuestras olvidadas secciones: Grandes Obras Clásicas. "Night in the Bald Mountain". Una Noche en el Monte Pelado o Una noche en la árida montaña es el nombre común para "la noche de San Juan en el Monte Calvo" ("Ivanova noch' na Lisoy gore"), un poema sinfonico de Modest Mussorgsky, un compositor ruso. La pieza fue originalmente inspirada por una historia corta en la cual un campesino presencia un acto de brujería en el Monte Calvo cerca de Kiev en la Noche de SAn Juan (equivalente a la Noche de Walpurgis). Con mucho de original, el trabajo tiene una historia composicional tortuosa y es conocido en muchas versiones distintas.
Aquí os muestro la tan conocida versión animada de la película de Disney de 1940 Fantasía. Con el grandioso y carismático Chernabog como protagonista.

Coprósculo: una de ... ¿vampiros?

El caso es que ya estaba advertido, ya cuando vi el primer trailer noté mi sentido arácnido dándome una patada en "salva sean las partes" avisándome del riesgo que corría ver aquella película. Algo olía a podrido en Dinamarca, pero aun así me dejé atraer por la curiosidad, por lo atractivo de ver una nueva cinta de vampiros y por qué no reconocerlo... al igual que Ulises, me dejé guiar por los susurros de una sirena.


El caso es que de una forma u otra me encontré sentado en la butaca de un cine listo para ver Crepúsculo.

Como ya os previne en aquel otro post, Coprósculo (como la llamaremos a partir de ahora empleando el adecuado prefijo copro, es decir: mierda) amenaza con contar una historia de amor entre una chica introvertida, y rarita, y un chico igualmente rarito pero que tiene a su favor que está tremendisimo, o eso pretende hacernos creer la película.

La gracia viene cuando se desvela que el chico es un vampiro...y... dios es que no sé para qué me molesto... la película es una puñetera mierda.

¡No vayaís a verla! ¡Si lo hacéis os arrepentiréis el resto de vuestras vidas! Pretendía hacer una crítica inteligente y sutil de semejante bazofia, pero es que éste "Corpósculo" no da ni para eso.

Una historia da amor que pretende resultar romántica unicamente basándose en miraditas, suspiritos y poses al estilo catálogo de Calvin Klaine. Una supuesta promesa de acción que no tiene más que una triste pelea a empujones entre dos adolescentes hormonados. Unos efectos especiales que ni siquiera alcanzan el nivel de un capítulo de Héroes, o incluso Smallville. Y una estética Vampirírica que se pasa por el forro de los cojones toda la mitología creada desde antes de Stoker hasta la fecha. ¡Desde cuando los Vampiros se vuelven plateados con el Sol!.... no no se queman señores, ¡se vuelven plateados! Por no mentar que ni siquiera tienen caracterizacion alguna, ni colmillos, ni frente abombada al estilo Buffy, sólo unos ojos amarillos (si pretenden sorprenderme con eso a mí....) y unas posturas como las que podríamos adoptar Muerte, Segundo o yo mismo jugando a las películas e imitando a un Mandril de la Patagonia.

Y lo peor es que dura DOS HORAS. Dos interminables y agonizantes horas con sus 120 minutos de sopor viendo como una trama que no avanza hacia ninguna parte se desarrolla para contar una historia que podría relatarse en un trailer de 10 minutos.

La película cumple las espectativas... promete ser un truño y lo es. ¡Avisados quedáis!

Camisetas Kryptonianas.

El tema es que por aquello de la Navidad que ya se nos echa encima (fun fun fun) estaba el otro día dándome una vuelta por un centro comercial, sí de los estandar, de esos con tropecientas tiendas de ropa, diez restaurantes diferentes de comida rápida y otros tantos cafés y un multicine de 8 o nueve salas, cuando se me ocurrió mirar algo de ropa, recordad que ya hablamos del buen gusto de un fliper a la hora de vestir.

Al margen de las montañas de horteradas que se intentaban colar como "a la últmia moda" me llamaron la atención el seguir viendo a la venta las siempre presentes camisetas de Superman, ya sea con el clásico escudo en el pecho, o con imágenes nuevas o clásicas del Kryptoniano en cuestión.

Claro, uno ha sido adolescente y se ha hinchado a llevar camisetas con algún superhéroe, ya sea Spiderman, Superman, o Batman y que le tachen de friki.... bueno ya a mi edad he dejado de hacer estas cosas. Pero charlando del tema nos preguntábamos por qué si se considera tan friki nuestro alegre mundo de los comics y los superhéroes siguen vendiéndose como rosquillas estas prendas.

La respuesta me la dio un maniquí embutido con una de estas camisetas apunto de reventar en las costuras. Al parecer un tipo atletico de gimnasio con biceps como balones de fútbol o un modelo morenazo y de ojos azules se puede permitir el lujo de llevar un camiseta de superman porque sorprendentemente no pierde su popularidad. Nadie lo toma por un friki, quizás por un chulo-piscinas, pero eso no tiene punto de comparación.

Sin embargo a los tipos normalitos de a pie a los que la naturaleza ha querido dotarles con otros encantos (váyan ustedes a saber cuales son) el llevar una camiseta de superman adquirida en tiendas de moda de lo más respetable ( cuyo nombre no voy a mentar por no hacer publicidad gratuita) les hace ser considerados unos simples frikis. ¿O quizás no, y yo estoy aburrido esta noche?

También una voz sabia me dijo que lo friki no es quien lleva una camiseta de superman o del Capitán América, sea un Adonis o no, sino el que piensa todo esto y añade...."esto lo cuelgo hoy en mi blog"

Pero ahora digo yo una cosa.... probad cualquiera de vosotros tipos de a pie a salir un día de bares con la indumentaria del modelo de la foto y luego me contáis que tal os ha ido...

¡qué pasa, si hay poco material hay que rellenar! Éste ha sido el post estúpido del mes (al menos de lo que va de mes)

Ninjas del Namek

¿Os acordáis de los esbirros de Piccolo: piano, tambourine y Drum Drum?

Pues atentos que ya están aquí los nuevos esbirros de Piccolo para la peli de DB.

Sí, esto es oficial.... bienvenidos a la nueva película Dragon Ball vs los Power Rangers. Así luciran los soldados de Piccolo y se llamarán Ninjas del Namek.... Esto cada día pinta mejor.

Jodiendo finales históricos.

El tema es que navegando por la web, me he encontrado una imagen hecha por algún friki fan que me ha molado.

Claro que esto jode aun más el final del Retorno del Jedi, sobre todo para los que se revolvieron en su tumba cuando se eliminó a Sebastian Shaw de tan soberbia secuencia. Por otro lado no tiene ningún sentido ya que Padmé no era un Jedi.

Pero la imagen mola.

Que siiii que no tenía nada de que hablar.