viernes, 31 de enero de 2014

Big Bang Theory 7x14: The Convention Conundrum


Y seguimos, amigos excursionistas, con puesta al día de nuestras series favortias. Hoy hacemos breve repaso al último capítulo de The Big Bang Theory.

Pese a las trasmas de los últimos capítulos que parecían querer avanzar en la relación de Penny y Leonard, recordemos esa ebria petición de matrimonio y todo el jaleo que supuso, las aguas vuelven a su cauce sin mucho más ruido, como sin nada de eso hubiera pasado.

De este modo tenemos un capítulo basatante aséptico y algo flojo que solo es salvado por los primeros 10 minutos y su invitado especial.

La trama del capítulo es sencilla. Las entrasdas de la siguiente Comic Con están a punto de ponerse a la venta por internet y el grupo está preparado para su compra online.

La secuencia de la compra que puede parecer una majadería para muchos, es realmente divertida para cualquier excursionista que se haya visto en la situación. No he ido nunca a una Comic con, pero si he comprado figuras de coleccionista limitadas el día de su venta y el capítulo refleja con humor esa endemoniada tensión que supone el mal funcionamiento de servidores por la saturación de los usuarios y la necesidad continua de reiniciar la web para acceder al formulario de compra antes de que se agoten.

Insisto que a los que nunca les haya pasado les parecerá algo tremendamente friki y subrealista, del mismo modo que Penny alucina al presenciarlo, pero creeanme cuando les digo, que eso pasa....

Sin embargo nuestros protagonistar serán incapaces de comprar entradas antes de que se agoten lo que llevará a Sheldon a pensar en montar su propia convención. Para ello se plantea posibles invitados famosos para la misma, consiguiendo contactar con uno de ellos.

Y aquí es donde llega el otro punto interesante del capítulo, el invitado especial: James Earl John, actor afroamericano y voz de doblaje de nada más ni menos que personajes como Darth Vader o el rey Mufasa, sin olvidar otros más cómicos con el padre de Eddie Murphy en "El príncipe de Zamunda".

Al contrario que otros personajes ilustres del mundo de la televisión, el cine o los comics que han salido en la serie, que suelen huir de Sheldon dado su comportamiento extralimitado y acosador, el personaje de James Earl John resulta ser una parodia de sí mismo, mostrándonos a un tipo juerguista, cachondo y de lengua incansable dando lugar a situaciones cómicas entre Sheldon y él como compañero de fiesta nocturna. Atención porque James Earl John no será el único actor Star Warsiano que hará autoparodio en este capítulo. Momentazo.



Sin embargo, y pese a este distinguido invitado el capítulo es bastante flojo, la subtrama entre el grupo de chicas no tiene mucho fuelle, en su salida para descubrir que la madurez es más aburrida de lo que esperaban y tras la compra fallida de entradas, el trío de compañeros restantes entran en un debate absurdo sobre si comprar entradas en reventa o no, sin enganchar mucho.

Resumiendo un capítulo de notable bajo con algunos gags interesantes, pero de nivel menor que otros grandes momentos de la serie.

Nota 7/10

miércoles, 29 de enero de 2014

Paperman: la belleza de la época dorada Disney.


Ganador del Óscar como mejor corto para 2013, esta maravilla había pasado desapercbida para mí al haberse estrenado precediendo a Rompe Ralph, película que no disfruté en el cine sino en mi casa mucho más tarde.

Puede apreciarse como pese a las nuevas tecnologías, este corto de animación más clásica de informática bebe de los diseños clásicos de personajes Disney.

Así podemos encontrarnos con una joven que es la viva imagen de la ingenuidad y picardía de Ariel y un chico que recuerda la torpeza de personajes como Roger de 101 Dálmatas o el reparto de Merlín el encantador.

No me dilato más, juzgad vosotros mismos. 

Revelado aspecto de las nuevs tortugas de Michael Bay

Bueno pues finalmente se han filtrado las primeras imágenes de los diseños de las nuevas tortugas ninja que se estrenaran de la mano de Michael Bay, dios nos pille confesados.

Aunque he de decir que no me disgustan tanto como temía.

Es cierto que hay una imagen horrible de un disfraz de Michelangelo basado en estos nuevos aspectos, pero que parece que no llegará a tal abominación. Eso queda relegado a la adaptación a disfraz infantil.

En primer lugar un buen primer plano de Leonardo y otro en el que también vemos a Donatello. Podemos apreciar un más que correcto modelado. Nuestras tortugas ahora se ven más mazadas, y no les sienta mal. Muchos lamentan la vestimenta añadida pero yo digo que no es muy descabellada y les afianza el caracter. Vemos cómo incorporan elementos japoneses al estilo samurai, sin llegar a ser armaduras completas como en TMNT 3. Donatello tiene además algunas piezas de equipo tecnológico acopladas lo que va a corde con su rol de científico del grupo.


También hay en la red una foto en la que vemos a las 4 en pequeño tamaño donde podemos apreciar algo los estilos de Raphi y Mikey, pero que no he podido colgar con buena calidad.

Por otro lado los bocetos de Shredder son interesantes. Temía que el principal antagonista de la serie se quedara en un simple mafioso y no hiciera gala de su característico aspecto afilado, pero nada más lejos. Este diseño recuerda al del superShredder del final de TMNT II. Es agresivo e impone, y eso es bueno, quizás recuerda algo a Megatron, pero no es algo que me moleste. Solo veo extraños los ojos, habrá que esperar.



 Muchos no están conformes con los diseños, pero para mí las tortugas de la casa Jim Henson pertenecen al pasado. Son estupendas películas, que no han envejecido nada mal, sobre todo la primera. Y sigo disfrutándolas como antes, por su humor estridente, sus carismáticas interpretaciones y su componente nostálgico. Pero ahora le toca el turno a la epicidad. Quiero ver tortugas guerreras que usen sus armas como en los comics originales, como momentos de música y cámara lenta. Mi miedo era que los diseños fueran demasiado sobrecargados, demasiado futuristas, pero creo que esta visión respeta el espíritu original y esos tintes leves samurais les da trasfondo.

Mis esperanzas han aumentado un poco y quiero pensar que no estamos ante otro Dragon Ball Evolution. Por mucho que hayamos criticado a Michael Bay sus tres Transformers resultaron épicas y si pone esa misma chispa vital en sus nuevas TMNT creo que tendremos un Blockbuster con el que disfrutar bastante.

Sobre el doblaje a un lado y al otro del charco.



Soy un  fan del doblaje en España, me encanta. De hecho de no ser por lo difícil que es llegar a ser alguien en ese mundo me lo hubiera planteado como carrera profesional, pero supongo que tanto eso como otras aspiraciones de mi infancia como las bellas artes o la paleontología suponían arriesgarse. En lugar de eso opté por mi otra vocación y me hice médico, aunque con la crisis tampoco es que haya sido menos arriesgado pero bueno esa es otra historia....



No puedo evitar tratar de reconocer las voces de cada personaje que veo en el cine y la televisión, de identificar a muchos de los actores de doblaje que están ahí detrás, quizás a la mayoría no les recuerdo el nombre, tan solo "esta voz es la de fulanito, menganito y aquelo otro en la pelicula tal..." pero me encantan. Y alabo su trabajo puesto que sé que es una profesión minusvalorada. 

Muchos piensan que doblar una obra original no es más que ponerse tras un micrófono e ir traduciendo en tu idioma con más o menos gracia y sin más complicaciones. Y la cosa no es así.

He tenido la suerte de conocer en persona a algunos de estos profesionales y su trabajo es tan digno y merecedero como el de los actores que vemos en las películas. No es limitarse a repetir unas frases traducidas, es buscar la entonación adecuada, saber transmitir, saber aproximarse tanto como sea posible al original para poder disfrutarlo de igual manera en nuestro idioma, y eso no está al alcance de todos.

Es cierto que el doblaje no deja de tener sus puntos negativos. A lo de que fue un invento para controlar la censura en su día no voy a entrar porque no viene al caso. Puede ser rebatible, aunque tenga cierto sentido, que el penoso nivel de inglés de este país no encuentre beneficio en que las películas extranjeras que vemos no se encuentren en su versión original. Bien, esto tiene algo de cierto que serviría para hacer oído y puede que la cosa mejorara algo, pero menos de lo que nos creemos. No nos ibamos a hacer bilingues, eso de seguro.

El principal problema es la pérdida de la mitad de la interpretación de un actor, al perder las modulaciones de su propia voz. Esto nos resta objetividad, al menos a quien le interese, a la hora de valorar interpretaciones de muchos grandes papeles, sean luego candidatos al Oscar o no. Aunque eso nunca ha impedido que hayamos disfrutado de un soberbio Forrest Gump, o de un irónico House, por poner dos ejemplos.

Otro problema añadido es que parece que el mundo del doblaje parece reducirse a un elenco muy selectivo lo que hace que en ocasiones asociemos las mismas voces con demasiados personajes, y eso para los oídos entrenados puede resultar chocante. Que Gandalf tenga la misma voz que Morgan Freeman, no resulta un problema en absotulo. Pero darse cuenta por una pequeá inflexión del tono que tras la profunda voz de Smaug se encuentra Fry de Futurama, el príncipe de Bel-Air, o el divertido dectective a tiempo parcial Castle, es cuanto menos raro. Por muy excelentes que sean cada una de estas interpretaciones, vaya por delante mis felicitaciones tanto a Ivan Muelas como al gran Pepe Mediavilla.

Como todo hay doblajes más acertados que otros, en ocasiones los que peor parados salen son los personajes de series de televisión. Hay, por ejemplo, un salto significativo entre el temple de los personajes de Smallville según la versión original o la doblada. Pero como todo es hacerse al oído. Y en muchos casos el doblaje mejora al original. Prefiere la voz doblada de Skeletor en la película de Masters del Universo que al Langella original, y Constantino Romero terminó de redondear al personaje del Terminator.

Y tras esta intro sobre las bondades y pecados del doblaje voy al asunto polémico. El doblaje aquí y allá.

¿Quién no ha encontrado una absurda pelea entre hispanoparlantes sobre el doblaje? Entre españoles y vecinos de las américas. 
Discusiones salvajes sobre quien suena mejor si Homer u Homero, hacen del doblaje de  los Simpson uno de los temas más espinosos de los foros.

Es absurdo, no hay discusión, el mejor doblaje es el español neutro........ jejejejejeje.... que noooo, que es broma. El mejor doblaje es aquel al que cada uno está acostumbrado. A los de aquí nos chirriará siempre la versión de allá y viceversa. No es cuestión de la variante del idioma, sino de lo que nos trasmite.
Porque recuerdo a muchos la polémica que ha creado los redoblajes de muchas películas Disney con su salida en DVD al pasar a español neutro. Un sentimiento de que ya no son las obras con las que crecimos. Claro, como que esas obras estaban dobladas en gran parte por estudios Argentinos y al perder batallas de derechos hubo que redoblarlas.
La Sirenita original era español latino, y probad ahora el español neutro, a ver si no nos chirría.

Siempre habrá trolls y pencos que se dediquen a crear polémica en los foros, pero los que tengáis dos dedos de frente daros cuenta que nunca se va a ganar esta eterna discusión porque ambas partes tienen razon.

Os dejo con uno de los más grandes del panorama actual...




La ladrona de libros.... (cuando los alemanes escribían en inglés y hablaban en español)


Empezaré por la verdad... no he leido el libro, queridos excursionistas. Por lo que me centraré en la crítica a la película sin tener las bases para comparar ambas obras. Lo cual en el fondo creo que me dio mayor objetividad a la hora del visionado.

Simplificaré.... lenta, muy lenta, lentísima. Al principio engancha. Los personajes son interesantes, carísmaticos, no especialmente originales, pero encajan bien en el engranaje y te pasean por la narración avivando tu interés, pero cuando llevas una hora ves que no vas hacia ninguna parte. Que no parece que exista otra vida más allá de esas calles y que allí es donde vás a quedarte durante el resto de la historia.

Según un diccionario, tanto el de la RAE, como el Español-Klingon, un ladrón es aquél que roba cosas, no aquél al que se las presta o que se las encuentra por la calle. No dudo que en la novela original esto debe de tener mucho más sentido del plasmado en el celuloide, pero aquí el hurto brila por su ausencia.

Reconozco que iba desinformado a esta película, pensaba que me encontraría ante una protagonista que azuzada por su pasión por la lectura, cometería todo tipo de temeridades por salvar las grandes obras de la quema Nazi, pero chasco monumental que me llevé.

Los libros y el aprendizaje de la lectura solo son un vehículo para contarnos una vez más y sin ningún tipo de originalidad especial, que los Nazis odiaban a los judios, que no todos eran tan malos, que en Alemania también lo pasaron mal. Poco más, no hay más en la película.

Bueno sí, ideas inverosímiles y disparatadas como que un judío se la juegue estropeándo un ejemplar del Mein Kampf y se lo de a una niña que no tenga mejor ocurrencia que pasearlo por la calle en su mochila.

Por otro lado resulta absurdo el galimatías idiomático que presenta sin desearlo, y más aun en su versión doblada. Los alemanes hablan en un Alemañol (que digo será variante del Spanglish) completamente inecesario pronunciando coletillas en alemán continuamente para luego escribir en perfecto inglés, algo bastante innecesario. Tan solo escribiendo en alemán habría bastado. Esto no se sostienen ni en la versión original.

Y sinceramente, no me apetece el esfuerzo de profundizar más en el análisis de esta película al igual que a su director no le ha apetecido el de adaptarla con mayor interés.

De lo mejor, Geoffrey Rush, carismático y embaucador como siempre y una protagonista novel de cara angelical y ojos vivarachos que consige una gran ejecucción dentro de lo que le permite el guión.

Y mención especial a la voz en off de la muerte, tremendamente interesante pero desaprovechada pues en lugar de realizar un completo relato omnisciente de toda la cinta se limita a momentos puntuales a capricho.

Total un 5/10, aprobado raspón gracias a un final que al menos te despierta algún sentimiento y a la línea general de la historia, que debe de haber sido trazada por la novela, o eso imagino.



Cómo conocí a vuestra madre: 9x16 How Your Mother Met Me



En la recta final de esta serie que nos acompaña desde 2005 es un poco tarde para hacer análisis exhaustivo de todo lo que ha pasado por ella, pero aun estamos a tiempo de caminar juntos en el último tramo.

Casi todos los que encontramos en Ted un espejo en el que mirarnos hace 9 años pudimos disfrutar de grandiosos momentos durante las primeras 5 temporadas y que posteriormente entró en barrena con una lenta agonía que estaba impregnando a sus originales personajes de un insoportable hastío.

De esta forma entrabamos en la 9 temporada para llegar a la aun cuestionable boda entre Robin y Barney y su agonizante transcuro en quasi-tiempo real. 

Con una Robin masculinizada hasta el extremo de tal manera que poco queda de la chica encantadora que a todos nos enamoró en las primeras temporadas. Los guionistas se han encargado, con bastante habilidad por cierto, de evitar cualquier atisbo de competencia que Robin pudiera haber dejado en nuestras mentes con respecto a la futura madre. Por mucho que Ted se encabezone ya no vemos a Robin como su media naranja, es demasiado independiente, demasiado fría, demasiado ¿canadiense?... ¿qué les pasa a los americanos con los canadienses?

Barney, quien ha aguantado casi el peso de la serie en las últimas temporadas, pierde fuelle. No funciona del todo como novio y menos como prometido. Aun tenemos todos que ver con nuestros ojos que esa boda se celebre, pero hay algo que nos escama a todos. El episodio previo, el 9x15, trató de demostrarnos que los sentimientos de Barney son profundos y sinceros, pero tras crear ese fabuloso personaje, visceral, egoista a la par que ingenioso, es muy dificil de creer semejante cambio mientras que al mismo tiempo evitan desprenderse por completo de ese punto de genialidad y locura que lo habían convertido en el personaje más original de la serie. Un ir y venir continuo entre la inmadurez y el compromiso que lo hace inestable.

Lilly y Marshall son los que menos cambios han experimentado a fin de cuentas. Sus vidas son las que más han evolucionado, se han casado, tienen un hijo, pero ellos se mantienen como pareja sin grandes cambios, con mejores o peores momentos, y con ese punto de perfeccionismo asqueroso que siempre han rezumado desde poco después de su boda. No molestan porque casi siempre ha sido así, es su papel. Su discusión sobre el sí de Marshall a su futuro como juez rompiendo el sueño italiano de Lilly no interesa, sabemos que no romperán por eso y tan solo nos distrae y ocupa valiosos minutos de cada capítulo con un relleno que se alarga demasiado.

Y llegamos a Ted. A nuestro espejo, a ese reflejo de una parte de cada uno de los que nos hemos enganchado a esta serie, seamos hombres o mujeres. Ese punto de locura dentro de la serenidad, ese espíritu soñador y ese idealismo de que lo mejor está a la vuelta de la esquina. Porque como bien decía un gran amigo todos nos sentimos un poco identificados con este personaje. Probablemente no nos parecemos entre nosotros. Tú que estás leyendo estás palabras poco tendrás que ver conmigo que ni me conoces o con tu compañero de trabajo que también ve la serie. Pero muchos vemos algo de nosotros en Ted, porque Ted es universal. Quizás muchos se crean un Barney o les divierta pensar que son como él. Pero en el fondo todos somos Ted.

O lo éramos porque también las temporadas han hecho estragos en él. Todos los foros lo comentan, todos lo sabemos, los guionistas lo han maltratado en aras de explotar "la gallina de los huevos de oro" patetizando el sueño de este pobre neoyorkino, obligándole a aferrarse a un patético enamoramiento con una Robin que ya nada tiene que ver con aquello que le hizo pensar que podía ser la mujer de su vida. 

Y con este desalentador planteamiento nos colocamos en la temporada final, con este planteamiento y con esta imagen.


Un "pché" generalizado, un "ni fu ni fá" que se nos coló a todos en la boca en el desenlace la de octava temporada al  ver revelado el rostro de la futura madre. Pequeña, sencilla, poquita cosa y privada de personalidad se nos hizo muy dificil creer que esta joven, Cristin Milioti, pudiera competir con la Robin original, con Victoria (cuya aparición sentó para mí las bases del espíritu de la serie en la boda donde conoció a Ted) o con otras tantas. 

Mostarla así fue injusto, una imagen sin derecho a defenderse. Hasta la 9 temporada donde nos han dado pequeños aperitivos de su personalidad en cada uno de esos momentos donde ha ido conociendo a todos menos a Ted. Pequeños momentos que parecían querer demostar su valía pero no ganaban impulso. 

Por no mencionar dolorosas e inverosímiles cagadas como adelantarnos la futura petición de mano de Ted sin demostar química alguna entre ellos. Después de que Ted robara una trompa azul, encontrara la pastelería ButterCup, hiciera llover y nos demostrara cómo enamorar a una chica en una cita de 2 minutos (otro momentazo romántico de la serie), tras toda esa genialidad y habiendo encontrado por fin a la mujer de su vida los guionistas saltaron en el tiempo y nos hicieron ver que llegado el momento de la verdad se limitarían a ponerlo de rodillas. Por mucho que estuviera en lo alto de un faro.

Pero por fin nos empiezan a compensar. Por fin llegamos a este capítulo. Un capítulo que olvida un poco a Ted y a los demas en la posada de Farhampton, para contarnos la misma historia comenzando de nuevo en 2005 desde otro punto de vista. Esos momentos de paraguas amarillo y tobillos vistos de refilón, esos momentos que nos dejaron con ganas de más, entre la sonrisa y el fastidio. Ahora vuelven pero desde el otro lado del río. Por fin la conocemos a ella de verdad, por fin la identificamos, quizás hubiera sido mejor desarrollarlo en varios capítulos, pero 20 minutos nos han sido suficientes para ver en ella lo que Ted verá en los capítulos que vendrán a continuación. Ya no es una cara en una ventanilla, ni la chica simpática que se cruzaba continuamente en los capítulos que llevamos de temporada. Aun no tienen nombre, y es una pena que vayamos a estar con ella tan poco tiempo. Después de tantos años solo nos acompañará unos capítulos para que Ted nos la arrebate y sean felices el resto de sus días, pero nosotros ya hemos comenzado a quererla antes que él y la secuencia final del capítulo nos ha demostrado que vamos a enamorarnos de ella.



Tras estos pesados años, me alegra que hayas vuelto "Cómo conocí a vuestra madre", te rogamos que no te vayas y te quedes hasta el final de esta historia que comenzaste con nostros en 2005.

Os dejo la secuencia final del capítulo para los que queráis verla de nuevo, ojo los Spoilers. 
La calidad no es la ideal, lo reconozco.



¿dije que no iba a hacer análisis exhaustivo......?

martes, 7 de enero de 2014

2014 cargado de aventuras....


Se acabó la Navidad y ya estamos en el 2014. Tenemos síndrome postvacacional, tenemos morriña de fiestas y Semana Santa aún está demasiado lejos.
Pero no desaniméis excursionistas. El 2014 llega cargado de nuevas aventuras, nuevas películas, lanzamientos de figuras y emociones. Tenemos cerca el nuevo Robocop y la secuela de 300, el lanzamientos del Legacy Dragonzord o la nueva Godzilla, y los próximos avances de la nueva trilogía Star Wars.

Por no mencionar que aun nos espera Smaug y su fuego en la conclusión del Hobbit....

Ánimo a todos que este 2014 promete ser apasionante...